Sin duda la mejor empanada de queso de Panamá (la de Queso Chela, pero de este lado del puente). Artisana 1984 tiene un enoooorme surtido de quesos, panes, postres, emparedados y comidas para consumir en su local y para llevar y son todos exquisitos.

Indudablemente que el toque "Cuquita Arias" hace toda la diferencia en este formidable restaurante. Sus recetas con ingredientes orgánicos y panameños se mezclan majestuosamente para lograr sabores que consienten al paladar. Es importante reservar o llegar temprano pues el lugar se llena para almuerzo.

Los donuts glaceados son lo que son. Me puedo comer tres; son livianos y muy sabrosos. A veces experimento con sabores distintos y, aunque son más pesados, generalmente son especialmente ricos.

Una vez encuentras el lugar prepárate para todo delicioso. Los productos están a la vista y el menú es muy variado. Sus quesos, todos caseros son deliciosos. Los precios son muy accesibles. El winner es la empanada de queso. Veo muchos clientes comprándolos por docenas.

Me siento que estoy sentado en la Champs-Élysées en uno de esos cafés con dulcería y panadería francesa. El lugar se mantiene constantemente lleno. ¿Será por la novedad? Sin embargo, cuenta con muchísimas personas para atenderte y concentirte.

No he visitado la Vinoteca en muchos años y se mantiene como un restaurante italiano casero. Sin embargo, a pesar de ser un clásico señorial, perdió su encanto. El menú es limitado pero tiene suficientes opciones para todos los gustos. La comida es buena. El escabeche de corvina está delicioso. Hay estacionamiento bastante limitado.

Mmmmm, qué rico estaba mi helado y el pie de manzana "a la mode" que me comí en Gelato & Co. El lugarcito se siente como estar en una gelatería europea y el servicio fue muy atento. Es un lugar ideal para llegar con niños pequeños.

Aprovechar la brisa del verano sentados en el espacio exterior de Makoto es una experiencia fenomenal. Los vientos alisios refrescan el ambiente y la vista hacia las torres del Área Bancaria y la Bahía de Panamá lo hacen a uno sentirse delicioso. Desde que uno entra a Makoto, ubicado en el piso 11, lo hacen sentirse especial y bien recibido. Dentro del restaurante se siente un olor un poco fuerte a marisco; es por eso que prefiero sentarme afuera en los colchones y el jardín que lo rodea. Todos los platos que sirven son excelentes, exóticos y vienen presentados de tal forma que uno desea, primero tomarles una foto, y luego degustarlo con mucha paciencia. Los meseros son muy atentos y responden a todas las preguntas con certeza. Es uno de los mejores restaurantes en Panamá. Para una experiencia culinaria WAU, yo recomiendo Makoto.

Me gusta WE porque es tranquilo y la comida tiene pinta de más saludable que en otros lugares. Sin embargo, noto que los ingredientes que usan, aunque buenos, no son de la más alta calidad. La ensalada napolitana tiene mucha lechuga y poco queso, tomate y aceitunas. La pita con tuna lleva una tuna que no tiene el sabor de las mejores. Me gusta la comida aquì pero no me dice WAU!

Este lugarcito en Casco Viejo es sencillo y práctico para tomarse un café con un dulce. El espresso, me dijeron que eran granos italianos, era muy bueno pero un poco frío. El lugar tiene la puerta abierta y es bastante caliente al medio día.