Una agradable sorpresa fue encontrarme con este lugar en la Via Argentina. Entré a pedir una dirección y la amabilidad y las sonrisas con que nos recibieron nos hicieron regresar a probar el café. Hay una buena variedad de cafés, No probé las comidas porque no era hora, pero se veía todo muy bueno. probé los almojábamos colombianos, hechos en sitio, y estaban muy ricos, las empanadas también. Pero lo que me hará volver es la atención y la amabilidad. Tienen también panes artesanales. Que llevo para probar. Te los entregan enteros o rebanados. También Tienen wifi y ambiente para trabajar y varias personas lo hacian mientras estuve allí. Me encantó este lugar!

Me gustó mucho este restaurante. La decoración muy acogedora, resaltando objetos muy panameños de una manera elegante y agradable. La comida; deliciosa, variada y destacando sabores muy panameños con ligeras variantes que los elevan. La atención, de primera! Una joya de lugar para ir a probar los sabores de mi pais!

Siempre visitar Santa Rita es una experiencia espectacular! Desde que llegas la atención es muy buena, todos los que nos atendieron fueron extremadamente amables. La comida exquisita como siempre que voy ya que es uno de mis lugares favoritos. En fin todo bueno, todo 5 estrellas!

He visitado este lugar varias veces por su comida muy rica y buena coctelería, pero hoy fui por última vez, porque el servicio bajó de mediocre a pésimo desde mi última visita. Para ordenar, prácticamente tuvimos que halar un mesero al pasar, ya que después de darnos los menus desapareció. Ordenamos unos nachos como entrada, para que los fueran preparando mientras decidíamos el plato fuerte. Por causalidad escuché cuando pasó nuestra orden de nachos de chorizo y bistec, y le decía a la cocina nachos de pollo. Lo corregí enseguida para evitar tener que devolver el plato al ser servido. Luego ordenamos unos tacos de arrachera y unas costras. Terminamos los nachos, y nadie se acercaba. Mientras esperábamos nuestros platos, veíamos a los meseros en toda clase de informalidades, uno de ellos hasta se quedó dormido en una mesa frente a nosotros. Los compañeros en vez de decirle que estaba mal, lo tomaron a broma y el siguió durmiendo. Finalmente vino una chica a despejar la mesa. Le dijimos que faltaba el plato principal. Se fue a buscarlo y tras demorarse un tiempo largo, nos dice que nunca el mesero puso esa orden, que se le había pasado ordenar nuestros platos antes se irse. Pedimos la cuenta sin esperar mas, y vaya sorpresa cuando nos íbamos, vemos al mesero, que se “había ido” sin poner nuestra orden, atendiendo otras mesas! Nunca se fue solo se le olvidó que estaba atendiendo nuestra mesa. Muy pero muy mal servicio. Buena comida pero así no se disfruta!

Fuimos a probar el restaurante con un cupón de Oferta Simple de una parrillada para 2 personas. Pensaba yo que estas ofertas son para que la gente vaya a probar y deberían esmerarse en que el plato fuera muy bueno, mas no fue así. Decía que la carne de res era Angus e importada y no lo parecía. Las costillas de cerdo y el pollo tampoco fueron nada digno de mención. No vi postres en el menú y no nos lo ofrecieron tampoco. La selección de vinos, muy escasa. No hay mas de 4 o 5 botellas de donde escoger. No hay nada que me inspire a volver.

El restaurante es muy lindo, con una decoración al estilo del hotel y el casco antiguo de la ciudad. La atención es de primera, los meseros muy atentos y amables. La comida es una exquisitez! El cochinillo con puré de otoe, delicioso. No probamos otras entradas porque todos en la mesa ibamos con recomendaciones de probar este plato. Los platos fuertes, deliciosos todos. Es un éxito cuando en una mesa de 7 personas todos encuentran que su plato estuvo delicioso! Probamos El Mero, La corvina (sustituyendo el pargo del menú), y los raviolis de espinaca. Probamos tambien 2 postres. La esfera de chocolate rellena de mousse de chocolate y frutos rojos, estaba riquísima. Definitivamente volveré porque la experiencia fue muy pero muy buena.

Este restaurante es excelente! La comida muy buena, las pastas; auténticas! Verdadero sabor de la Nona italiana! Me gusta mucho que hay variedad, no todos los platos son de pasta. El filete al vino y a las 3 pimientas es buenísimo!! Pero lo que es aun mejor que la comida es la atención! De verdad te hacen sentir atendido y especial. En resumen, me encanta!!!

La comida es excelente, pero con el cuento del descuento que te ofrecen, quedan en el precio normal de otros restaurantes de la misma categoría y no te tienen que dar por ejemplo el descuento de jubilados. Si miras los precios sin el supuesto descuento del 35%, es uno de los restaurantes mas caros de Panamá. Mi esposo y yo pedimos 2 platos, 2 entradas y una botella de vino y la cuenta con descuento de 50% por el plan de experiencia gourmet, fue de $104. con 50% de descuento!!! se les va la mano! $20 por un ceviche, $29 un plato de pasta con pollo! $35 por un pulpo!!! Precios inflados para decir que te dan descuento, sales con la sensación de que te han estafado.

excelente lugar para disfrutar una comida! Desde que te reciben en la puerta, hasta que te despiden te sientes atendido como un rey. El ambiente del restaurante es muy agradable, he ido viernes y sábados y hay un músico que canta muy bonito sin interrumpir en la intimidad de tu mesa. La comida es de primera! Todo lo que he probado ha estado delicioso! Recomendado 100%. Se ha convertido en mi restaurante favorito.

La pagina web del restaurante me llenó de expectativas, y oh desilusión! De los platos de Pasta del menú solo tenían 2. Casi todo lo que pedíamos, nos indicaban que no había. Y esto fue un viernes a las 7:00 pm que se espera si comenzando el fin de semana tienen una gran cantidad de platos agotados? El plato de pasta que pedimos, no tenía nada digno de mención. Y el filete de res, insípido, acompañado de brócoli que fugazmente pasó por agua, bajo de sal, un tanto duro y sin ninguna salsita, o aderezo que lo engalanara. El acompañamiento de papas duquesas que ofrecía el menú no las tenían, me ofrecieron puré, mas les dije que no podía comer lácteos, me ofrecieron papas rústicas y cuando vino el plato vino con puré. Ante esta decepción, no nos quedamos a probar el postre.