Nos cautivó los detalles tan acogedor del local desde la calle, lo que nos hizo decidir entrar a conocerlo. El local con sus grandes ventanas te da la sensación de estar al aire libre, su decoración natural y el volumen ambiental a buen nivel para conversar. Habíamos decidido iniciar directo con los platos fuertes, sin embargo, el chef personalmente nos ofreció una entrada de queso Brie con frutos secos. Cuando nos llegó a la mesa, el chef lo flambeo y enseguida los aromas a naranja no se hicieron esperar. La combinación del queso con el dulce del caramelizado de las frutas, es una explosión para el paladar. Pedí pollo (1/2) ahumado en leña de nance. Desde que llega a la mesa el ahora del ahumado té envuelve. Si debo indicar que estaba un poco seco, sin embargo tiene buena sazón que junto con la salsa barbacoa y la ensalada César con queso feta hizo que mi experiencia fuera muy buena. La hamburguesa de carne angus, pudo haber tenido un poco más de sazón, pero en los bocados se palpaban todos los elementos, lo que la complementaban muy bien. La misma mantuvo su estructura y vino acompañada de papás fritas (no son wedge). La atención a cada detalle tanto del chef como la del mesero desde el inicio fue genial y es la razón para que la experiencia se sintiera memorable y dejarnos con las ganas de volver pronto.

El ambiente del restaurante es hermoso y cada detalle de la decoración ha sido bien planeado. El servicio de primera, todo el personal está pendiente de que no falte nada y que todos los comensales estuvieran satisfechos. Los platillos salieron en el tiempo prudente. La opinión de los otros comensales fueron positivas (los platos vacíos indicaron esto). Sin embargo, pedí el risotto de hongos y me ofrecieron chicharrones. De este plato puedo decir lo siguiente: El risotto estuvo delicioso, bien ejecutado. El arroz en su punto de cocción, textura cremosa y definitivamente delicioso. Sin embargo, debo indicar que sobre el risotto colocaron 4 trozos de chicharrones, los cuales eran demasiado grandes para el tipo de plato y todo se veía confuso en esa presentación. Cuando me ofrecieron los chicharro, pensé que serían molidos sobre el arroz, buscando ofrecer una capa de una textura crocante al paladar y que en mi opinión se vería mucho más elegante en este platillo. Para la próxima lo vuelvo a pedir solo, que también está la opción.

Es una experiencia completa, desde el servicio y atención de primera, el ambiente moderno y rústico a la vez; pero los platillos de autor son los protagonistas principales, en donde la perfecta combinación de sabores y texturas, logran que sea una deliciosa aventura para el paladar y terminar con la satisfacción de una cena de primera.

Lo que se probó estuvo muy bueno, y sus ingredientes frescos. Muy buena y amable las atenciones de su personal.

Cuentan con un menú variado italiano, buenas opciones de pizzas y pastas; la sopa de minestrones además de deliciosa muy saludable. Además, de tener muy ambiente y buen servicio.

Nos encantó, desde las entradas de chorizo y queso, para pasar al Vacío y la tiras de asado, ambas en los términos pedidos. El tomate asado es un éxito total y el postre estuvo rico, aunque en el momento solo presentaron una opción. El ambiente del lugar, la atención de primera, todos muy pendientes de que no faltara nada.

Excelente comida, atención y ambiente. Buena experiencia familiar y en todo momento estuvieron pendiente de todo a pesar de estar lleno el lugar.

Muy buena atención, siempre estuvieron pendiente de todo, nos gustó mucho la porciones de la parrillada mixta y es de los pocos restaurantes que ofrecen puré rústico.

Excelente lugar, el ambiente muy acogedor. Su personal muy atento a todo y la comida en buenas porciones y de excelente calidad. Muy recomendado.

Él servicio desde que llegamos fue muy bueno, estuvieron pendiente de todo. Aceptamos probar las recomendaciones del chef y cumplieron más allá de las expectativas. Las porciones todas son adecuadas que da espacio para llegar a probar un delicioso postre.