El lugar es pequeño pero acogedor, muy bien ambientado. Excelente atención. La comida bastante regular, todos los platos del menú usan aguacate lo cual es genial porque responde al nombre del local, pero la combinación de algunos platos se queda corta de sabor. Yo pedí la hamburguesa, que no viene con pan, sino con dos trozos de aguacate enormes que hacen las veces de pan, la hamburguesa es difícil de comer y termina siendo una especie de ensalada de carne en el plato porque se desarma inmediatamente, de sabor regular, la salsa tipo chipotle es lo que mas le aporta. Los fideos al pesto son ricos, buena porción. La ensalada Oasis viene disgregada y uno le pone los ingredientes que quiere, pero es bastante regular de sabor también. No creo que regrese.

Como siempre delicioso, a término y excelente calidad de los alimentos. La atención impecable. En la terraza corre un vientito ideal.

La comida es regular, creo que depende mucho lo que se pida porque el Kibbe estaba muy rico pero los platos principales masomenos, un poco desabridos para ser comida turca. La atención excelente. El ambiente está bien, pero a mitad de la cena pusieron una banda en vivo tocando boleros latinos... nada que ver con el lugar, eso nos hizo terminar de comer rápido e irnos antes, ojo no cantaban mal, pero no iba con el lugar.

Rico y agradable. La comida se nos hizo bastante sana y sin llena de grasa, fuimos domingo cerca de la hora de cierre y nos atendieron muy bien igual. Volvería.

Muy regular en todo aspecto. Fui apenas abrieron y había 30 meseros dando vueltas sin rumbo, dos personas que mandaban con aires de superioridad, haciendole saber al resto del universo que ellos eran los encargados de los meseros, una actitud muy desagradable. Pedí un steak término medio y vino seco, el side de cebollas asadas vino crudo. No volvería.

Muy bella la decoración, es lindo que tengan las ventanas abiertas porque corre brisa por los ventiladores y está fresco sin tener que recurrir al aire acondicionado como en todos lados. La atención muy buena, atentos todos los meseros. La comida bastante regular, no había papas fritas, bastante básico para ese tipo de lugares, aunque nos dijeron que era por un problema con el gas... el chorizo estaba un poco seco, se ve que nos tocó el que habían hecho hace rato, las mollejas estaban fileteadas muy finas y se secaron. Yo pedí el pollo de $22 y me trajeron una pechuga abierta que estaba rica pero muy decepcionado, por el precio pensé que me traerían medio pollo asado, no una miserable pechuga. Mi esposa pidió un asado de tira ($27) y vienen dos abundantes pedazos pero con un porcentaje de grasa muy alto, del tipo de grasa que no se deshace en la cocción, son bloques de grasa, bastante mala la calidad. El acompañamiento de los dos cortes es una triste ensalada en un bowl pequeño con un poco de lechuga, tomate y cebolla. No creo que vuelva, hay lugares muy superiores para comer carne, aunque no tan lindos.

Delicioso, es la mejor comida de estilo japonés que he probado en Panamá. Estas palabras sirve de relleno porque me lo pide Degusta.

Muy muy ricas las entradas, lengua de res y el pulpo, excelente mezcla de sabores y texturas. Platos principales muy ricos también, el risotto de sancocho podría mejorar. Atención excelente y el ambiente inmejorable, especialmente la terraza con vista al mar.

Comimos rico, mejor que en otros restaurantes chinos de la ciudad. No fue memorable pero vale la pena ir. Como en todo restaurante Chino los platos son abundantes, especialmente el arroz y los fideos. El aceite estaba un poco viejo y se notó en los wantones. Buena atención y buen ambiente.

Buen ubicado en el centro de la ciudad, la atención muy buena a pesar que fuimos en un horario medio raro. La comida excelente, los sabores bien combinados y fieles al tipo de cocina que venden. Volvería para un almuerzo con clientes relajado, no para una cena romántica.