Este restaurante es muy curioso, su dueño personalmente te atiende en la mesa y te da un trato personalizado, muy amable y sabe de su cocina, se nota que le apasiona. La carta no es muy amplia hasta que el dueño te habla de los especiales, jamas me han dejado decepcionada, son totalmente exquisitos y con un toque completamente italiano. Tienen una variedad de vinos italianos deliciosos. La presentación de los platos aparte de deleitar la vista, al paladar es una cosa de otro mundo. Se los recomiendo con los ojos cerrados.

He ido ya dos veces a este lugar, es único en panamá y la verdad es que me parece que es una de los lugares mas bonitos y particulares que he visitado aquí en panamá.. Los chocolates son fabulosos, los dulces son típicos griegos, muy buen pan (fresco) y el ambiente espectacular... Los cafes son increíbles y todo es servicio personalizado... Volveré muy pronto a comer baklava y las polvorosas!

He venido con mi novio desde que lo habrieron, la verdad es excelente.. Lo recomendamos al 100%. Todo en el menu es delicioso, muy buenos precios y en especial el tres capas de chocolate de postre, en lo personal es mi favorito! Vengan de verdad no se van a arrepentir, es una experiencia unica en panama.