Buena comida y excelente atención, se complementará con el acondicionamiento de la terraza, sugeriría incorporar más platos para hacer la diferencia con otros restaurantes peruanos.

El ambiente es propicio para conversaciones amenas con amigos y/o clientes. El servicio bueno, aunque hay que mirar los detalles. Buena carta de vinos y el menú es variado y bastante bueno; punto a destacar para mejorar en positivo es la langosta, la cual a pesar de presentarse a la mesa a fuera pero sobre su esqueleto, hay partes que dejan al descubierto que estudio en el congelador, por ello sugerimos si la misma obviamente no es fresca se calienta a baño María por más tiempo, pues se desperdicia mucha carne, lo cual es muy importante tomando en cuenta que el precio del platillo es por libra. Saludos amigos les recomiendo este restaurante, a pesar de los detalles, lo cuales no merman la buena experiencia. Nos veamos a la mesa.

Del restaurante me pareció excelente su menú peruano, con algunos altibajos que el tiempo y la experiencia les ayudarán a perfeccionar. El local es acogedor, con un ambiente sencillo y moderno, el cual invita a comer y beber, mientras se disfruta de la compañía de amigos, pareja o familia, pues hasta con música en vivo es posible conversar y departir. Punto a mejorar es que en la parte exterior al permitirse fumar, cada vez que se abre y cierra la puerta el humo se introduce en las primeras 2 cuartas partes del restaurante, que es precisamente las mesas en que se observó a las familias con niños, se sugiere instalar en la puerta sopladores de viento de los que impiden el paso de insectos. Por otra parte mucho personal, eso debería ser bueno, sin embargo la atención no fue la mejor, en cuanto a la espera de las bebidas etcétera, aclaró que son muy amables, pero por momento te puedes sentir ignorado. Pienso que Mr. Limón mucho potencial, solo debe pulirse y ojalá lo hagan, pues es una opción diferente en la cocina peruana. Como de costumbre nos vemos a la mesa amigos.

Muy buen ambiente, la comida muy buena, digamos que se constituye en una mirada progresista de la comida oriental en nuestro País, mucha curiosidades, merece la pena seguirle el paso. Pocas cosas que observar, solo resaltaré la demora injustificada en la entrega de las bebidas, punto a mejorar, pues al momento de la calificación el recinto no se encontraba lleno. Como siempre amigos, nos vemos a la mesa.

Ambiente excelente, más cuando se transforma en rumba. Respecto a la comida, mucho mucho que desear, desde arroz crudo pasando por la salsa de los espaguetis que pareciera fueron de la lata al plato sin cocción previa. El ceviche es algo de lo qué hay que alejarse. Si se cambia la cocina, es una opción muy buena, pues tiene todo lo demás. No comentaré de la carta de vino, la cual fue una leyenda urbana, pues estaba en “remodelación”. Me disculpo por la dureza, pero al pan pan y al vino vino.

Este restaurante de corte italiano, tiene un excelente ambienta tanto en una área cerrada como en su terraza, ambos ambientes invitan a los negocios y al compartir con amistades en un entorno semi-formal y descomplicado. En lo referente a la atención, se puede mejor. Lo que respecta a la carta existen varias opciones muy buenas, sin embargo el punto de sal se encuentra en un desequilibrio total y no le hace justicia a los platos. Como siempre amigos nos vemos en la mesa.

Este restaurante en ambiente es más que excelente, su decoración y arreglos son de los mejores que hubiese visto antes, sobre todo el ambiente y la experiencia de la terraza, la cuál es sumamente recomendada para turistas, clientes extranjeros o familiares que vivan fuera y estén de vista en Panamá. La comida me parece excelente simplemente digan de un Top Chef. Sin embargo, lamentablemente mi primera y única visita, me dejo un sabor agridulce, esperamos 1 hora por el plato recomendado, el cual aunque bueno no justifica tan larga espera para un platillo que se supone debía estar pre-organizado, eso sin contar los 20 minutos entre entradas, lastimosamente nos vimos ante la experiencia de ser los últimos comensales del área cerrada y aún así no llegaba el plato recomendado. Les pido no prejuzgar este excelente restaurante, pero prefieran siempre la terraza es como un restaurante aparte. Como siempre nos vemos a la mesa, saludos amigos.

Este restaurante fusión al que tuve la oportunidad de visitar, se presentaba interesante precisamente por la fusión, pero me deja más preguntas que respuestas referente a su menú, aún probamos alrededor de unos 15 platos, de diferentes secciones de la carta, aún no tengo un criterio para calificar a este exponente culinario y no es la intención el ser injusto, por lo que deberé darle una segunda oportunidad. Como siempre nos vemos a en la mesa.

Esta sucursal mantiene, por supuesto, el menú tradicional de fuente de soda, el cual incluye obviamente el delicioso No Me Olvides. Lo que destacó en esta ocasión, es que para esta sucursal se incluye un almuerzo de comida corriente, que resultó ser nada corriente dado lo exquisito (arroz blanco, pollo asado y porotos), lo cual se presenta poco común a lo que acostumbramos ver en La Inmaculada, lo que demuestra que la exigencia del mercado y la respuesta oportuna de una fuente de soda que se diversifica en pro de sus cliente, quienes en ese sector no tienen muchas opciones. Aplausos para La Inmaculada por la acertada estrategia de mercado, espero amplíen el menú a por lo menos 2 opciones de plato. Y cómo les digo usualmente amigo nos vemos en la mesa.

Excelente muestra gastronómica española, el ambiente es sencillo pero sobrio. La presentación de los platos es muy apetecible y se destaca la variedad de entradas frías y caliente sobresalienlas añejas al ajillo las cuál no dieron tiempo siquiera de fotografiar. La variedad de melosos destaca, junto con sus carnes, sin embargo deja a deseara los callos, los cuales quedan a deber. Les recomiendo este restaurante, pues su imponente infraestructura deja la apariencia de un lugar costoso sin embargo es de precios promedio y por debajo si lo comparamos con la calidad de los platos. Como siempre amigos nos vemos en la mesa.