Que rico y muy atentos todos. Tal vez los antiguos fenicios hayan sido los creadores de la cocina mediterránea, árabe e israelita mucho antes de que siquiera existiera Grecia, Italia, España y Portugal o Marruecos quienes hoy en día representan la gastronomía mediterránea por excelencia. Comer comida libanesa es transportarse en el tiempo, de hecho mientras comía en el restaurante Fenicia de Multicentro, me perdí en una de las fotos de la costa libanesa (fenicia) que tienen colgadas en la pared. Luego tomé mi celular y busqué fenicios en wikipedia. Me puse a leer hasta que llegó la comida... deliciosa.

La comida es buena, sin embargo los precios son altos. Esto se justifica si usan productos de calidad en sus recetas. He ido dos veces y parece ser así. Por otro lado, la atención es buena al principio, pero terrible al final. Cualquier cosa buena que tuviera la comida se desmorona con el simple hecho de que te traten con desprecio los meseros. Además es evidente un trato preferencia hacia los extranjeros. Esto es terrible. Además las dos veces que fui incluyeron la propina en la factura sin avisarme. Voy a regresar porque la comida típica de allí me gusta, pero también voy a pelear con esos absurdos meseros. ¿Dónde está el gerente del local?.

Muy rico y muy divertido. La comida es abundante y buena. Siempre salgo muy feliz de allí.

Los conos son muy pequeños para el precio (alrededor de $5.00 cada uno). Hay que comerse 5 de estos para que sea una comida. En las fotos se ven enormes, pero son miniaturas. Se demoran media hora para entregarte la cuenta, o sea yo me tuve que parar e ir a la caja porque el mesero me decía que ya venia, pero no venia nunca. Los dos tipos en la caja, que supongo eran los dueños tienen cero amabilidad, con unas caras duras cogieron la paga y dieron el vuelto. No entiendo el motivo del porqué todo fue así, si el lugar estaba casi vacío, y yo fui paciente y amable hasta el final.

La comida, el ambiente y la atención siempre es muy buena. Las porciones son abundantes, siempre dejo comida, no por mala, si no porque las porciones son muy generosas. Siempre salgo feliz de allí.