Hoy fuimos mi esposo y yo a probar La Vasquita. Pedimos la tortilla con cebolla caramelizada que estaba muy buena y el pan amb tomaquet no era nada particular. La tarta vasca de sabor estaba rica pero la textura era más tipo cheesecake que tarta vasca. Igual si regresaríamos. El salonero fue amable. Recomiendo ya que tienen una carta tan pequeña agregar croquetas de jamón que es algo muy de España.