La atención y la decoración del lugar es muy buena. Pedimos de entrada un sushi (dragon roll, me parece) muy bueno y de porción generosa. Luego pedimos su versión de Margarita con un toque picante y semillas de ajonjolí en el borde la de copa - personalmente no me gustó. El Moscow mule, estuvo bueno. El salmón a las brasas estuvo bueno pero nada wao. En general esperaba un poco más, tipo una experiencia al comer.