El lugar parece estar en medio de la nada junto a un río hermoso, tiene 3 ambientes diferentes, el interno es bien acogedor, la terraza techada es bastante sencilla y la terraza al aire libre es lo mejor, justo alado del río, de las mejores vistas que uno puede tener en un restaurante. La comida fue excelente, solo pedimos plato fuerte, tanto los rabioli como la pasta estaban deliciosos, los precios pueden paracer caros, pero la calidad y cantidad de los platos lo valen. El servicio es regular y el único punto negativo es la falta de estacionamientos.

Excelente restaurante, desde el momento que te acercas al mismo la arquitectura te muestra qe vas a ir a un lugar diferente, la zona interior es hermosa, el diseño interior pensó en cada detalle con respecto a la decoración y el mobiliario, fuimos de noche, hicimos la reserva en la terraza, la mejor opción para el clima boqueteño, la atención del personal fue muy buena, pedimos de entrada el higo envuelto en bacon, estuvo riquísimo, los dos plato fuertes qué pedimos fueron increíbles, el pollo frito con rissoto de guandú y el cerdo al horno waooo, que sabor, lo único deficient o fueron los coacktailes, tienen mejorarlos, no fueron de nuestro gusto. Para nuestra sorpresa son pet friendly y tienen menú para las mascotas.