Después de años de no parar aquí decidimos hacerlo para recordar los choripanes clásicos y de pollo. No han cambiado, ni la comida ni el ambiente en años. Pago solo en efectivo y no vende cervezas.. Se puede mejorar.

Sillas un poco incómodas. Desayuno waffles y o variedad de panes y o cup cakes. Omelette mexicano o tres quesos.

Importante reserva una de las mesas (hay dos) de 4, personas junto a la chimenea de afuera. Platos recomendado chuletas. Y o costillas de cordero. Puede llevar su vino (descorche 12.00).dulce de chocolate.

Vista espectacular. Platós de pasta muy buenos (canalones, spagetti a la pescatore). Cerveza bien fría. La dueña atiende el local.

Excelente la Ensalada de lechuga, pepino y naranja y Plato fuente estofado de cordero. (llamar para confirmar que lo tienen y o reserva) Muy bueno el atún.