LO BUENO - comida 5/5 la trucha y la hamburguesa con papas. Salieron rápido las órdenes. - el ambiente y escenario del hotel A MEJORAR - restaurante vacío y 25min para traer agua y pedir orden. -el mesero olvidó preguntar en cocina un cambio a un plato, por alergias. No se acordó cuando regresó a pedir orden. -levantarnos a pedir más agua y postre -alzar la voz al mesero adentro para que traiga la cuenta, demoraban aparecerse en la terraza. - pie de limón sin sabor a limón, sabía a leche condensada y una leve pista de limón.

De lo mejor que he probado en Volcán hasta el momento. Realmente le hacen honor a los productos de tierras altas. Berenjenas a la par esas increíblemente rico, trucha fresca a la plancha con buena ración de yuca. La hamburguesa de las mejores que me he comido en el país incluyendo sus papas fritas caseras, carne a la brasa e ingredientes frescos. Varias opciones de vinos, atención bastante buena y relación calidad precio inmejorables. Muy recomendado.

De mis lugares favoritos para todo tipo de salida. Ya cena una cena romántica, familiar o solo para pasar el rato con amigos este lugar es mágico. Adentro ambientada como una vieja casa, tipo museo. Afuera con una terraza a la orilla de una quebrada. Amplio menú desde buenos sándwich, burgers y pizzas hasta platos gourmet. La atención es súper personalizada y muy esmerada. Las personas que recomiendo este lugar siempre salen felices. El menú lunch es un éxito, económico y buena calidad como este arroz con guandu fresco, ensalada de papas y puerco ahumado.

Restaurante con menú corto pero variado, sus platos son muy bien elaborados, con mucho verdor, hortalizas y frescura. Buenas porciones así que le hacen justicia al precio. La trucha muy rica aunque se le pasó la sal al cocinero en el pescado. Las hamburguesas enormes con papas muy rica con pan casero. Lo mejor es su terraza a la orilla del río caldera y su fogata para asar malvas. Para mejorar la atención, para ser restaurante gourmet espero más detalle, habían que llamar continuamente a los meseros pues estaban TODOS mas ocupados ordenando mesas y sillas vacías vs. comensales que ya estábamos ahí.

Un area para no solo degustar el palador si no la vista y un clima de relajacion. El servicio muy atento y expedito. Pude degustar una variedad de platos, como el filete stroganoff, berenjenas a la parmesana, rollo crocante de pollo y frescas ensaladas directo del campo. Me impresiono la elaboracion de sus platos, muy bien presentados y excelentes porciones con respecto al precio. Mi experiencia fue magnifica y tienen una variada seleccion de cafe (incluyendo geisha) con diversos procesos y tostados para elegir. Altamente recomendado desviarse si van Boquete o bajan a David.

Buenas porciones de pescado en mi caso un pargo frito enorme con bastante patacones y al mejor precio. Los pescadores estan a 1 minuto del restaurante asi que el pescado sale fresco diariamente. El servicio es bastante atento pero nada especial puesto que es un restaurante modesto. El ceviche con maracuya que pudimos degustar estaba excepcional. Todo a una menor fracción del precio que podemos encontrar en cualquier restaurante,. Altamente recomendado si pasan por Boca Chica.

Me deje guiar por degusta para ir a comer al mas rankeado en Chitre. El local esta algo escondido en la vía principal; ambiente tranquilo, familiar y agradable pero muy vacío. Sobre la comida, una hamburguesa bastante grande pero el pan y la carne se despedazan muy facilmente así que tuvo que comerse toda en pedacitos el cual fue bien incomodo; los langostinos berracos en una cama de tamal en olla pero con muchas aceitunas pude contar unas 20 aceitunas en un solo plato y con huesillo, mezcla excesiva de sabores diferentes en sus platos. Otro plato de fondo fue el filete de corvina con risoto que no estaba bien ejecutado, algo duro el arroz aun y nuevamente mezcla de muchos sabores y salsas que no concuerdan como por ejemplo reducción de balsámico junto a una corvina al ajillo. Los wantones de entrada si estaban bastante ricos igual que la limonada. No volvería a venir a este restaurante ni lo recomendaría. El servicio debo admitir que si estuvo muy atento.

Fui con mi pareja por primera vez y ordenamos los pargos fritos, nada en especial o espectacular en sabor, creo que estaban algo pequeño para el precio. El ambiente durante la noche es bueno con música en vivo solo que hay que estar pendiente de los meseros para que te atiendan bien, traigan agua, recordarle el pedido y demás. No creo que regrese a este lugar en mi próxima visita a Pedasi.

Creo que el ambiente es lo mejor que ofrece, la decoración es muy detallada y amena; hace que tu momento sea bastante bueno pero no de 5 estrellas. El servicio estuvo excelente, era una mesa de 6 personas y todo se sirvió con prontitud y la actitud del mesero bastante positiva y cordial. La comida bastante buena, tienen un menú diferente al de la ciudad pero si ordenas un plato original te lo preparan aunque no este en la carta. Debo decir que la comida aunque bien estándar italiana, estaba bien ejecutada; pero esperaba tal vez una complejidad mayor tomando en cuenta que tienen una competencia muy creativa al lado.

Bastante estandar con los demas Kotowas pero con la particularidad que estas en la tierra de ellos. La plaza donde se encuentra es bastante bonita aunque hay otro local donde esta el mirador antes de bajar al pueblo. Las chicas que atienden muy agradables todas; ordene un emparedado de pavo y no me lo esperaba tan gigante, incluso para compartir si solo quieres tomarte un café y picar algo, el dulce de guineo riquisimo. Me agrada que en este local los artículos que venden como su café empacado y tazas son mas económicos que en el resto del país. Definitivamente una parada obligatoria en el pueblo de boquete