Visitamos por 2da ocasión el lugar. La comida criolla fresca variada y buena cantidad. Demoran en limpiar las mesas y no tienen donde poner las bandejas sucias en caso de uno querer limpiarla. Los baños ese día eran un desastre. Recomiendo que el personal utilice redesillas.

Visitamos el 3 de noviembre, la comida deliciosa, nos encantaron las pailas para servir la sopa y arroz. La decoración muy buena. Lo malo es que no recogen los platos muy rápido de las mesas y tampoco hay donde ponerlos entonces era incómodo. Pero la comida muy buena.

Visitamos el 3 de noviembre, probamos el gelato de pitaya que estaba bueno pero no memorable, el de cereza estaba muy rico igual que el de oreo.

Yo me quería llevar todo!!! Quedé antojadade un cheesecake de blueberries que venden. El gingerbread está riquísimo! Nos llevamos varios anillos de maíz, brownies, galletas de mantequilla

Amamos este lugar! Tienen un menú extenso y delicioso. Durante la última visita nos enteramos que ya no venden bandejas de empanaditas de fresa, ojalá vuelvan a incluirla en el menú.

Este lugar fue una experiencia que repetiremos cada vez que viajemos a David. La sangría es refrescante y deliciosa!!! La picada de mariscos riquísima!!!!! todo estaba muy delicioso!

Su comida sigue siendo la de mejor relación cantidad/costo y un sabor muy rico. Luego de la remodelación el local quedó mucho mejor lo sí se han quedado cortos ese en la cocina pues la cantidad de gente que llega los fines de semana es mucha para la capacidad que tienen en cocina y demora mucho en salir la comida. Sin embargo es tan rica la comida que uno lo espera pero debe ir con tiempo ya que en días feriados la espera será mucha.

La sucursal de Alto Boquete se ha convertido en nuestro lugar favorito para comer cuando estamos de visita. Buena atención, comida fresca y te dan la opción de pedir a la carta también. En tiempos de feria es una opción para comer sin el estrés de buscar estacionamiento del pueblo.

Paramos en la plaza para no manejar en mal clima y decidimos probar este lugar. Nos ofrecieron langosta pero decidimos pedir ceviche de corvina, un filete de carne con puré y un pollo hawaiano con patacones. La comida estuvo buena, nada fuera de este mundo. La cantidad muy poca para el precio de los platos. Buena atención. El ceviche tenía una contextura que no sea veía muy buena pero tenía buen sabor. Podríamos ir de nuevo para probar langosta y tener una conclusión final del lugar.

Es en definitivo la parada obligatoria. La estrella es la empanada de queso blanco pero!!! Prueben la de pollo también porque está buenísimaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!! No siempre tienen todas las opciones del menú y es que es demasiado extenso!!! Recomiendo tengan algunas opciones integrales disponibles siempre porque hay un mercado que se queda velando a los demás ya que pocas veces tienen estas opciones en vitrina. Entiendo porqué solo aceptan efectivo pero por lo menos una caja con este servicio sería perfecto.