Deliciosa la comida aunque con frecuencia se quedan sin ciertos productos del menu. La atención no es la mejor pero son muy amables, solo les falta entrenamiento y mejores controles en los pedidos y coordinación con la cocina. El ambiente es lo mejor.

Un rincón escondido antes de Decameron, una agradable sorpresa encontrar tan buena comida en el interior del país. La atención buena y el ambiente excelente. Altamente recomendado y lo voy a enviar a mis amigos para que no se pierdan esta experiencia.

El mismo buen servicio, comida y ambiente de antes. No falla, siempre quedan bien. Para volver. La atención personalizada del equipo humano te hacen sentir en casa.

Ha mejorado mucho desde su inauguración. La comida siempre ha sido buena y ahora han agregado nuevos platos muy sabrosos. El ambiente es expectacular, al lado del mar y las piscinas. La atención es muy amable aunque el servicio es un poco lento quizás por la capacidad de la cocina.

Deliciosos platos, ambiente natural y muy buena atención en medio del centro de Boquete. Pedimos un plato de arroz con pollo, ensalada de feria y plátano, además del guacho de guandu con pork belly. Ambos platos muy buenos, pero el guacho estuvo expectacular.

Fuimos por un café, una cerveza y unas entradas. El café excelente, las entradas fueron patacones con chorizo y el ceviche de corvina con maracuya. Muy sabrosos, buen atendidos y un lugar precioso.

Una cena fuera de serie en Boquete. Primero nos fuimos al bar por unos cocteles, el ambiente espectacular y muy buena atención. Luego en el restaurante probamos los chicharrones con patacones, el rissoto de langostinos y la hamburguesa. Todo delicioso y muy bien atendidos en un ambiente muy agradable.

Un lugar muy acogedor al aire libre, con una atención excelente y comida deliciosa. Pedimos el Bucatini a la Matriciana y Spaguetti a lo Scoglio, los dos muy sabrosos. Un postre de cheesecake de oreo y capuchino.

Uno de los mejores restaurantes en el área de las playas. La comida siempre es muy buena y la atención excelente, el ambiente relajado al aire libre y con todas las medidas sanitarias. Probamos los langostinos y el stir fry de langostinos. Expectaculares.

Finalmente pudimos regresar a Los Camisones, al aire libre, alejados de otros clientes y bien atendidos. El mismo lugar acogedor y limpio, con la misma buena comida de siempre. Pedimos el filete de pargo con patacones y la cazuela de mariscos al ajillo con arroz blanco. Ambos platos deliciosos. Para volver pronto.