Siempre digo que para el interior, el tema es la comida (temas como el servicio y el ambiente realmente pasan a segundo o tercer plano). En esta ocasión fui con mi esposa y el resto de mi familia a comer. Entre los platos de entrada pedimos samosas, wantones rellenos y alitas picantes. Todo buenísimo y sirvió de abrebocas para los platos fuertes. Algunos de los platos fuertes ordenados fueron pescado, filetes de res y chuletas. Los comensales comentaron que sus platos estuvieron muy buenos (algunos de los acompañamientos fueron: arroz, patacones, yuca frita). En mi caso, pedí filete de res a la pimienta con yuca frita. Excelente el filete, de muy buen tamaño, y las yucas fritas en su punto perfecto de cocción. El servicio es su punto más bajo: Las meseras se olvidaban alguna que otra ocasión de las bebidas, y no tenían un dominio del menú. Lo que sí debo destacar es que los tiempos de servicio (usualmente lentos) esta vez fueron rápidos pese a que el lugar estaba concurrido. El ambiente es bastante campestre, con mesas y sillas de madera, abanicos altos y el salón abierto. Si se solventa o aguanta un posible servicio lento, el lugar es altamente recomendable por el sabor de sus comidas.

Muy buena la comida y muy buenas porciones. Fui con mi esposa y sus papás. Ordenamos bruschetta con pollo, pan de ajo, sándwich de combinación, sancocho, orden de patacones y un bistec de carne. Todo rico, delicioso y calientito. El servicio es algo lento (el sancocho salió de penúltimo, por decir algo) y el ambiente al aire libre es mejor que dentro. Muy buena comida, aunque no probé las pastas en esta ocasión. Seguro para mi próxima visita las pruebo. Recomendable

Es una pena. La comida no es mala y los precios son bastante accesibles, pero cuando todo eso lo opaca un mal servicio, hace difícil que pueda recomendarlo. Fui con mi esposa y su familia de paseo a El Valle y paramos aquí, siguiendo la premisa de que "si el restaurante está lleno, es porque es bueno". Insisto, la comida no es mala, y prueba de ello es que el pollo a la parrilla que ordenamos, junto con el sancocho fueron los platos más destacados. El bistec picado y el pollo guisado que pedimos estaban regulares, con buen guiso pero la propia carne estaba simple. Con los bajos precios que tiene, es una joya de lugar, pero el servicio la daña. Nos sentamos, y esperamos 10 mins para que nos trajeran el menú, otros 10 minutos para que nos tomaran el pedido, y luego lo increible: 45 minutos solamente para que nos trajeran las bebidas y agua (las cuales no aceptamos, porque luego de 20 minutos de espera, mi cuñado y yo tomamos las sodas ordenadas directamente de la refrigeradora que tenían al lado de la caja). Luego, otros 15-20 minutos más para que nos trajeran la comida y la trajeron mal, equivocando la orden (a mi cuñado le dieron papas fritas en lugar del arroz blanco que había pedido de acompañamiento) y solo trajeron los bistec picados; después de otros 10 minutos, finalmente llegó el sancocho de mi esposa y mi pollo guisado. Finalmente, otros 15 minutos pasaron para que trajeran el pollo a la parrilla de mi sobrina. Haya o no estado lleno el lugar, un restaurante en un lugar tan turístico como El Valle no puede darse el lujo de demorar cerca de 1 hora y media en servir una mesa de 5 personas. Todo lo anterior, sin dejar de mencionar que mi cuñado y yo también nos paramos a buscar nuestros cubiertos y vasos mientras esperábamos nuestra orden. El ambiente está bonito, pero si hace calor y no prenden abanicos ni aire, el sofoco que se siente no es placentero. Una pena que no se puesa recomendar este lugar. La comida average a buen precio queda en 2do plano luego de tan mal servicio.

Previo a salir de El Valle, es un buen lugar para comprar algo de panadería artesanal. Compré un pan piso, unos palitroques y una orejas. Todo estuvo rico. El servicio es básico, pero en mi libro le doy extra puntos adicionales por permitir (aunque sea para los clientes de 1 determinado banco) la posibilidad de cashback (algo muy muy raro en todo el país). No tiene ambiente, pero vale la pena parar aquí para comprar snacks dulces o salados de panadería. ¡Recomendable.

Este es un lugar típico para parar a comprar un snack estilo panameño (entiéndase pastelitos, empanadas, carne frita y cualquier otro bocadillo deep fried), aunque también tienen pan, chichas y demás. En esta ocasión paré y compré empanadas de queso mozarella y empanadas de pollo. No son la excelencia culinaria, pero como siempre digo para los restaurantes del interior, acá se encuentra un buen sabor que resuelve a buen precio. El servicio es casi inexistente y de ambiente no tiene nada, ya que es parecido a una tienda. Pero no se puede negar que el lugar tiene su encanto. Como dije, aquí se compran cosas de buen sabor a un precio bastante razonable. Es un lugar que resuelve por el área de Chame. Recomendable.

Tuvimos un evento familiar en Coronado y ordenamos pizzas para llevar. Pizzas de peperoni, de peperoni con jamón, y de carnes mixtas. El sabor y la masa eran buenos; la cantidad de grasa no tanto. Era impresionante como quedaba el aceite en nuestros labios luego de cada mordisco. De servicio, solo puedo decir que el servicio de cocina tuvo un puntaje regular, ya que como dije al inicio, la masa estaba muy buena, pero la grasa de estas pizzas la verdad que es un punto que resta y bastante. También puedo comentar que nos sirvieron las pizzas en un tiempo bastante rápido. Un lugar que resuelve en Coronado. Pizzas con muy buen sabor, pero muy grasosas. Se puede pasar para saciar la curiosidad.

Hace un par de años había comido aquí (antes de crear mi cuenta en Degusta) y me había parecido bueno. En esta última visita no quedé encantado. Estuve con mi papá y mi novia almorzando. El menú me parece bien variado, pero los precios algo altos para lo que se ofrece. De entrada pedimos sancochos de gallina y un gazpacho que estuvieron buenos. También ordenamos wantones de corvina que fueron regulares, aunque mejoran un poco con la salsa de tamarindo levemente picante que ponen. De plato fuerte unas hamburguesas negras por fuera y rosadas por dentro, dando a entender que no fueron bien cocinadas. El servicio dejó mucho que desear: a pesar de la amabilidad en la advertencia de la chica que nos atendió, pienso que un restaurante no puede darse el lujo de decir que la comida está demorando entre 45 minutos y 1 hora "porque el chef está solo y no tiene ayuda". Creo que el tiempo de servicio es clave para un restaurante y poner excusas para ello no es aceptable. Luego, viene el tema de atención en sí: hubo que llamar a las chicas para que nos sirvieran agua cuando se nos acababa; no habían algunos platos del menú, etc. El ambiente, entiendo que quiere ser playero y demás con los abanicos y la madera, pero con las altas temperaturas que estamos teniendo, creo que no vendría mal ir considerando la idea de un aire acondicionado para la comodidad de los clientes. Salvo algunos platos del menú del día (ojo, no todos) y algunas entradas, el resto es comida de regular calidad a precios muy altos para lo que en realidad es. No niego que resuelve, pero hay opciones más baratas que resuelven mejor. No creo que regrese.

Fui con mi novia a cenar temprano. Ordenamos una especie de pan entomatado q estuvo bastante rico (aunque pudo estar mejor si no se les quemaba el queso). Luego de plato fuerte pedimos un sancocho y una pasta del chef, bueno todo pero nada memorable. El servicio fue bastante regular. La muchacha q nos atendió era algo despistada, no nos llenaba los vasos de agua (había q pedírselo), olvidó los cubiertos, y nos comunicó que no tenían un menú especial que pedimos cuando en realidad, al momento de retirarnos, vimos que lo estaban sirviendo a otros comensales que habían llegado después de nosotros. Los tiempos de servicio fueron relativamente buenos y la cordialidad (a pesar de la torpeza) siempre estuvo allí. Como ambiente tiene unas mesas dentro con una barra en aire acondicionado y unas mesas fuera al aire libre para disfrutar más del sol. Se puede decir que puede complacer a cualquier gusto en ese sentido. Tienen buena comida, pero el servicio debe mejorar. No es un mal lugar, pero en una próxima visita a Pedasí prefiero explorar otras opciones antes que repetir aquí.

Excelente lugar para comer algo chévere en Pedasí. Vine con mi novia y comimos una especie de pulled pork sandwich y un ceviche de corvina. El sandwich viene con el puerco desmenuzado sin salsa, y luego el mesero la trae para que uno le ponga al gusto. El ceviche de corvina estuvo riquísimo y nos dejó con ganas de más, pero ya estabamos llenos. Vimos otros platos bastante generosos y a precios bastante razonables. El servicio es bueno, los muchachos fueron amables y pacientes con nosotros q estamos de visita por primera vez en Pedasí. Los tiempos fueron bastante rápidos y la comida, de nuevo, muy rica. El ambiente es chévere, con pantalla para ver partidos de deportes (como un sport bar abierto). Adicional, los martes y viernes tienen música en vivo, que es algo agradable en un pueblo como Pedasí. Lindo lugar, con buena comida y bastante agradable. Recomendable 100%!!!

Un lugar donde hablar de que a uno le sirvieron un "plato de obrero" es quedarse corto ante la realidad de lo que te sirven en cuanto a las cantidades y porciones. Saliendo de David, paré con mi novia aquí para almorzar. Pedimos una sopa chica de wantón, una orden de ea tones fritos agridulce y una orden de arroz frito de combinación. La sopa chica no tiene nada de chica; la orden de wantones trae 10-12 wantones y el arroz frito de combinación es un cerro de comida. Eso sí: todo, absolutamente todo, estuvo delicioso. Mención especial para los wantones, que creo que son los mejores que he comido en el país. Y a precios súper económicos. El servicio fue atento por parte del mesero que nos atendió. Bastante amable y cordial. Los tiempos de servicio fueron bastante buenos. La razón por la que le califico bajo en el servicio fue por que me fue imposible ir al baño. No sé si fue por algún cliente desconsiderado o por negligencia del local de no limpiar, pero los baños no pueden presentarse así a la clientela. El ambiente es el típico de los restaurantes de comida china: mesas de 4 o más personas, escritos chinos en las paredes y un lobby en la entrada que te recibe al llegar. Lo único distinto (que no entendí muy bien) fueron las pantallas de televisión. Luego de ver lo del baño, no quedé con ganas de ir a sentarme a comer allí. Pero, como dije en un comentario anterior de un restaurante en Volcán, en el interior uno va a los restaurantes por el sabor de su comida y nada más. En base a eso, me permito recomendar. Este lugar para pedir para llevar.